Dentro de la sarta de estupideces y mentiras que dijeron los defensores del mal llamado «Bus de la Libertad», (“Dios creó al hombre y la mujer está científicamente comprobado”, “si los hombres usan bicicletas con canasto están pervirtiendo niños”, “en los colegios enseñan la ideología de meterese semen en la cara”, y que «en Chile querían legalizar la pedofilia»), un par de señoras, en situación de viejas culiás, expresaron sin arrugarse que «en Canadá estaban legalizando la zoofilia y la pedofilia». Al respecto, un artículo de NM noticias explicó como los fanáticos religiosos empezaron a divulgar esta mentira:
Uno de mis contactos en Facebook compartió una noticia de un medio en español diciendo que Canadá había legalizado la zoofilia siempre y cuando no hubiese penetración en el acto. Radicada en Montreal desde hace cinco años, pensé dos cosas: si esto fuese cierto, lo habría leído primero en un medio local, y además, esto no se corresponde con la cultura local. Entré a leer el artículo y encontré muchos vacíos, pero también encontré un enlace al artículo de donde sacaron la información y, en éste, otro enlace a la sentencia del tribunal en el caso citado. Cinco minutos y tres clics después, estaba frente a la verdad. ¿Qué fue lo que pasó realmente?
La Corte Suprema de Canadá fue interpelada respecto al caso de D.L.W. en Columbia Británica, un hombre acusado de pedofilia y zoofilia. La defensa acudió al organismo para desechar los cargos de zoofilia ya que los actos cometidos por el hombre no implicaban penetración, de acuerdo con la definición conocida del delito en la Confederación. ¿Por qué la zoofilia fue legalmente definida como penetración a animales? Probablemente, en la época, era la manera conocida de practicarla. El juzgado se encontró en la imposibilidad de levantar cargos de zoofilia contra el acusado porque el significado legal del término está restringido a la penetración. Sin embargo, la Corte Suprema instó al Parlamento a revisar la definición del delito, ya que este ente es el único que puede tomarse esa atribución.
¿Qué pasaría si el tribunal se adapta a la situación y acepta los cargos haciendo una interpretación flexible de la ley? Se crearía jurisprudencia a ser utilizada en otros casos. Es decir, ante este precedente, otros defensores podrían solicitar una interpretación más flexible de la ley para sus casos, apoyándose en el precedente de este caso. Sólo tomaba cinco minutos y tres clics para descubrir que esta noticia era falsa. En el mejor de los escenarios, ninguno de los medios que reprodujo la noticia se tomó cinco minutos para verificar que la zoofilia no fue legalizada en Canadá. En el peor escenario, lo hicieron pero no les importó a la hora de usar un titular que seguramente atraería tráfico.
Vivimos en la era de la estupidez. Donde la falta de educación, la alienación y el fanatismo religioso han transformado a internet en una cloaca para fomentar el fascismo, el miedo y la ignorancia. Es responsabilidad de todos combatirlo