En libertad y sin ninguna medida cautelar ni investigación pendiente, quedó el estudiante de Sociología de la Universidad de Chile que había sido acusado de agredir a un carabinero en la marcha del pasado 1 de mayo. Pese a que la Fiscalía estaba segura de haber identificado al agresor, en la audiencia quedó al descubierto un cuestionable proceso de investigación que llevaron a cabo los funcionarios policiales para dar con el presunto sujeto.
Según relata Radio BioBio, tras difundirse la agresión que sufrió el policía por medio de un video en internet, la unidad de «Inteligencia» de Carabineros sacó una captura del material audiovisual donde se veía parcialmente el rostro de uno de los atacantes y con esa imagen, buscaron en los perfiles de la red social Facebook por medio de reconocimiento facial hasta dar con la fotografía de alguien que se pareciera, el cual resultó ser el estudiante acusado en el caso.
Ante esta verguenza, el magistrado descartó cualquier participación del joven, afirmando que el alumno ni siquiera se parecía a la persona que se ve en el video, y llamó a la Fiscalía a tener más seriedad al llevar a cabo las indagatorias. Por cierto, además se comprobó que éste había estado trabajando hasta altas horas de la madrugada ese día, razón por la que no asistió a la marcha. Tras la audiencia, el estudiante acusó que el incidente era “una persecusión política claramente”, debido a actividades sindicales que realiza.
ASÍ CON LA «INTELIGENCIA»…
POR CIERTO, MUCHO MÁS CLARA ES LA IMAGEN DEL CARABINERO QUE GOLPEÓ A UNA MUJER EN ESA MARCHA. PERO ESO NO SALDRÁ EN LA PRENSA