De similar manera al avión de la misma aerolinea «que se cayó» el año pasado, en donde Rothschild se transformó en el único dueño de una importante patente luego que sus socios murieran, en el avión que se estrelló esta semana en Ucrania, iban alrededor de 100 científicos que se dirigían a una conferencia sobre el SIDA en Australia.
Entre las víctimas figura el holandés Joep Lange, un reconocido investigador sobre el Sida, además de decenas de expertos que se dirigían al 20º Congreso Internacional sobre Sida en Melbourne, incluido Lange. En este sentido, Trevor Stratton -especialista en SIDA y VIH- afirmó a la TV australiana que “la cura del SIDA podría estar en ese avión, nunca lo sabremos. No puedes evitar preguntarte sobre lo que ocurrió en ese avión”.
IGUAL TODO DEBE SER UNA EXTRAÑA COINCIDENCIA…