1) Chile es el 2do país con más presos por cada 100 mil habitantes de la OCDE, (sólo nos supera Estados Unidos), ¿En serio quieren seguir metiendo a personas en la cárcel en vez de dar educación, igualdad de oportunidades y disminuir la brecha social? Mientras exista tanta desigualdad (un economista inglés aseguró que la mayoría de los chilenos vivía en condiciones de esclavitud), podrán seguir encarcelando personas y jamás acabarán con la delincuencia.
2) El Cacerolazo facho, o mejor dicho, Cacerolazo de la Burguesía, no tienen ninguna justificación y en el fondo sólo es una maniobra política más de la clase alta y de la UDI, similar a querer el retorno de la detención por sospecha, meter a niños presos y crear policías municipales, iniciativas que tienen el mismo denominador común y buscan el mismo objetivo: Reprimir lo más posible a la clase trabajadora. Si en verdad estuvieran preocupados por la delincuencia, tendrían que protestar contra ellos mismos.
3) Cuando hablamos de «sensación de inseguridad en el Barrio Alto», veamos la cantidad de Carabineros que disponen estas comunas. Providencia: 381 habitantes por Carabinero, Vitacura 496, Las Condes 698, La Granja 768, San Bernardo 1000, Maipú 1.199. Son muchos menos y cuentan con más Carabineros. ¿En serio protestan por la inseguridad? Ni hablar de la agenda y los intereses de instituciones como «Paz Ciudadana», citada en todos los medios cuando se habla de delincuencia, que pertenece al golpista, delincuente y colaborador de la dictadura Agustín Edwards.
4) Parece obvio, pero como los medios de información masivos jamás tocarán el tema no lo es, la increíbe falta de proporcionalidad en las penas entre los delitos que comete el pobre contra los delitos «de cuello y corbata». Es así que mientras absuelven a los ejecutivos responsables de la colusión de las farmacias (27.000 millones de pesos) y tenemos a la diputada UDI Claudia Nogueira formalizada por fraude al fisco y sólo tuvo que devolver 30 millones de lo que ya se había robado, tenemos el absurdo de una persona que recibió 5 años de cárcel por robar un balón de gas y el de 2 campesinos que recibieron 8 años de cárcel por robar un saco de papas.
5) La delincuencia que comete el pobre es el menor de los problemas que tiene este país, que las quejas de la clase acomoda hagan más ruido al ser dueños de los medios de comunicación es otra cosa. En Chile tenemos a una clase empresarial explotadora, corrupta y evasora de impuestos al mismo tiempo que tenemos a políticos sobornados que responden a los intereses de estos empresarios. Cuando se hable de mano dura contra la delincuencia, si no se incluyen también los delitos que cometen los ricos, sólo quieren meter presos a los pobres.
6) Entender el proceso de cómo se genera la delincuencia no es justificarla. Justificarla es cuando este proceso se ignora y quieren meter presos sólo a los pobres mientras la clase alta puede robar en la más completa impunidad. La violencia estrucutral del sistema es el mayor de los delitos y nadie habla de eso. Claro, es mucho más fácil atacar al lumpen y esconder debajo de la alfombra el origen del problema. Lo que la burguesía llama paz social es en realidad el silencio de los explotados. O como explicó Galeano, el poder jamás va a confesar que está en guerra contra los pobres que genera.