La mano dura contra el crimen organizado aplicado por el Gobierno en su proyecto de «agenda corta contra la delincuencia», sigue trayendo buenas noticias para que los ciudadanos podamos sentirnos más seguros. Este fin de semana, Carabineros dio un nuevo golpe al incipiente terrorismo capitalismo, al ponerle un parte a un peligroso abuelo que vendía globos.
Este hecho se suma a la desmantelación de la banda de estatuas humanas, a la persecución contra los traficantes de jugos naturales que le quitan el negocio a pequeños emprendedores como Watts y Andifrut, a la vendedora ilegal de lechugas y cilantro, al tráfico de frutillas, a los músicos clásicos y a los peligrosos estudiantes de cocina. Como dijo el nuevo Director de Carabineros: “Los malos tienen que saber que los vamos a poner en la cárcel”
NO EN SERIO, ESTAMOS COMPLETAMENTE CAGAOS