Tras su bochornosa conferencia de prensa donde no reconoció ningún delito, donde más encima se fue en contra del periodismo por informar, nuevos antecedentes revelados por Ciper elevaron de 730 a 900 millones los pagos de SQM realizados al entorno de Pablo Longueira. Donde recordemos, hasta su familia recibía dineros. Parte del artículo de Ciper señala:
El gráfico que aparece en el informe de la auditora estadounidense Shearman & Sterling sobre Pablo Longueira (UDI) es revelador. La tarea que se le encargó al estudio fue medir la frecuencia y magnitud de los pagos irregulares de Soquimich (SQM) asociados al entorno de distintos dirigentes políticos, para evaluar el riesgo de que la minera haya cometido el delito de soborno. Basta una mirada para concluir que el gráfico dedicado a Longueira es el que muestra el mayor monto de pagos irregulares desde la empresa minera controlada por Julio Ponce Lerou.
La auditoría que le encargó la propia minera a Shearman & Sterling concluye que entre 2009 y 2014, SQM entregó $730 millones a sociedades y personas relacionadas con el ex senador y ex ministro de Economía. Pero SQM no es la única empresa que ha aparecido en las indagatorias por las platas políticas ilícitas entregando dinero a cambio de boletas o facturas sin respaldo contable a personas asociadas al entono político y familiar de Longueira. Hasta ahora, testimonios recogidos por el Ministerio Público y por el Servicio de Impuestos Internos (SII) dan cuenta de al menos otras 13 empresas que pagaron dinero a personas que han reconocido no haber realizado ningún trabajo que los justifique y que las boletas eran solicitadas desde el entorno del dirigente gremialista.
En total, el cálculo hecho por CIPER es que durante todo ese período las fundaciones y personas naturales o jurídicas vinculadas a Longueira recibieron pagos bajo investigación de Impuestos Internos y del Ministerio Público por más de $900 millones. CIPER recopiló los testimonios que se encuentran en esas investigaciones y revisó las rectificaciones de pago de impuestos que han realizado algunas empresas mencionadas. El resultado es que existe una línea continua de pagos irregulares, los que se mantuvieron mientras Longueira ejerció como senador, que continuaron cuando pasó a ser ministro del gobierno de Sebastián Piñera y que no se detuvieron cuando anunció que se retiraba de la política, al declinar su campaña presidencial a mediados de 2013. Los pagos que asocian a Longueira al financiamiento ilegal de la política están hoy diseminados en los tres expedientes abiertos en el Ministerio Público: Penta, SQM y Corpesca. Pero muy pronto debiera abrirse una carpeta especial y que debiera llevar el rótulo: investigación por el delito de cohecho.