Pongamos las cosas en perspectiva: Estamos en la peor crisis de legitimidad de la institucionalidad de la historia, la democracia representativa se cae a pedazos, y la gente está empezando a cuestionar el poder y a exigir sus derechos. Por eso, todo discurso llamando a la «buena onda» y «a ser positivo», debe ser visto con sospecha, considerando que tenemos un sistema económico, social y político increíblemente violento contra las personas.
Es este contexto, aparece una sospechosa campaña, sitio web, facebook y twitter incluidos, para «combatir el odio y generar conciencia sobre el nivel de violencia que existe en las redes sociales». ¿Quién podría estar detrás de una iniciativa como esta? ¿Quién sería capaz de gastar millones para hacer funcionar esta campaña? Porque nos guste o no, si fuera una iniciativa de un hippie pacifista daría lo mismo, cosa muy diferente cuando vemos que hay grandes empresas ligadas a la ultraderecha tras ella. Simplicity y Brandmetric.
Simplicity es una agencia de publicidad que entre sus clientes se encuentran La Sofofa, Clínica Las Condes y AFP Modelo. Brandmetric por otra parte, es un caso mucho más interesante, ya que era la empresa contratada por el Gobierno de Piñera para espiar la opinión en las redes sociales de los chilenos. Esta especie de CNI digital, está relacionada con el ultraderechista Pablo Matamoros, asesor del gobierno de Piñera, quien saltó a la fama por hacer el ridículo en una «masiva protesta» frente a La Moneda en contra de los Gobiernos de Cuba y Venezuela.
Amigas y amigos, el discurso del pacifismo, la no violencia y de «evitar el odio» son increíblemente funcionales a la actual explotación que ejerce el sistema económico. Su objetivo es censurar la libertad de expresión, y anular la indignación de las personas para que no protesten a pesar de ser constantemente pisoteadas. Lo anterior, claramente expuesto cuando vemos quienes son los que hacen constantemente estos llamados: La misma clase social privilegiada de siempre.
Actualización: Se confirman nuestras sospechas, la DC acaba de presentar un proyecto para censurar los comentarios en las redes sociales