Si la verguenza no podía ser mayor en la Armada luego que marinos de la Fragata Lynch fueran descubiertos que espiaban a sus compañeras a través de un completo sistema de espionaje, el cual incluía cableado por toda la nave y cámaras en alta resolución, ahora se sumó que más encima, les robaban los calzones a sus compañeras y los guardaban como «trofeo». La Estrella de Valparaíso señaló:
«Durante la inspección de una maleta que guardaba el uniformado en el sector de los lockers o casilleros del buque, se descubrió una prenda íntima femenina, específicamente del tipo calzón. En primera instancia, el uniformado manifestó que la prenda era de su polola, pero finalmente reconoció que correspondía a una de las marineras de la fragata Almirante Lynch (…) luego alegó que otro de los imputados en la investigación fue el autor de la sustracción de la vestimenta desde una de las habitaciones de la compañera y señaló que la prenda posteriormente fue compartida entre ellos como si se tratara de un «trofeo de guerra». Por ahora, se ha conocido sólo la sustracción de la prenda íntima de una de las mujeres, y no se descarta algo similar con las otras marineras.
En el fondo, todo esto es culpa nuestra por mantener a estos vagos inútiles pulmones vírgenes