Además de ser un tipo corrupto que amasó su fortuna robando y estafando, además de llevar toda una vida evadiendo impuestos, Sebastián Piñera es un mitómano que no se arruga lo más mínimo a la hora de mentir sobre los «éxitos» de su Gobierno. Todo con la complicidad de los medios masivos burgueses, que como defienden sus mismos intereses validan todas sus mentiras. En este caso, hablamos de las falsas: Disminución de la delincuencia, reducción de la pobreza y aumento del empleo. Tres temas en los que está basada su actual campaña presidencial, y que son una completa y soberana mentira.
Falsa Disminución de la Delincuencia
Según estudios desarrollados por la Fundación Paz Ciudadana, (que para nada es una organización «de izquierda»), que mide a los hogares cuyos integrantes han sido víctima de un delito, actualmente el 38,9% de los hogares chilenos manifiestan que algún miembro de su familia ha sido víctima de robo o intento de robo. Porcentaje que disminuyó desde la entrega de presidencia de Sebastián Piñera, cuando el porcentaje alcanzaba un 43,5%, el índice más alto registrado desde el 2000. Esto, a pesar de la lucha contra la delincuencia que el expresidente aseguró. En cuanto al primer mandato de Bachelet, al ser consultados los chilenos, el 33,6% de la población manifestó ser víctimas de robo o intento de robo. Por supuesto, todo lo anterior tomando en cuenta que hablamos de la «delincuencia que comete el pobre», ya que la que cometen los ricos es casi legal y nadie termina preso por aquello. Ni hablar por supuesto, que la delincuencia está directamente relacionada con la Desigualdad Social.
Luego de ser secretario ejecutivo adjunto de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), Antonio Prado, se reunió con el Ministro de Desarrollo Social, Joaquín Lavín, con el fin de formalizar su decisión de no continuar colaborando en la elaboración de la Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional (Casen), de medición de la pobreza, tras ser involucrada en un debate sobre manipulación de las cifras en el último sondeo. El papelón internacional fue tan grande, que importantes diarios del mundo como el New York Times se refirieron al fraude de Piñera:
“Sus afirmaciones de que el gobierno bajó los niveles de pobreza lo llevó a una vergonzosa pelea con la CEPAL, que se ha distanciado públicamente de la forma que La Moneda interpretó los números. El gobierno ha tenido que gastar mucho de su tiempo tratando de calmar los cuestionamientos de economistas, congresistas y periodistas acerca de la validez de los números. Para peor, cuando finalmente el gobierno dio los detalles del margen de error de la encuesta (0,82), los economistas rápidamente insistieron que Piñera había estado alardeando de cifras, que estadísticamente son insignificantes y que podrían indicar que la pobreza subió o bajó. La Cepal dijo que nunca antes funcionarios del gobierno habían insistido en hacerle cambios a los resultados. Lo que el gobierno luego presentó, no es lo que la CEPAL concluyó. Esto es muy serio. Nunca antes había sucedido«
En los últimos 45 meses se han creado 990 mil empleos. Sin embargo, casi 2 de cada 3 (66%), son de inserción endeble: cuenta propia de baja calificación y de tiempo parcial, asalariados subcontratados y familiares sin remuneración.Se registran 1.053.281 asalariados que no tienen contrato de trabajo, son trabajadores que reciben ordenes, cumplen horarios, son subordinados, pero sin contrato de trabajo, sin posibilidades de sindicalizarse ni de negociar colectivamente, sin protección laboral. Son falsos asalariados. A nivel nacional equivale a casi el 17,9% del total de asalariados. La Fundación Sol explicó la trampa utilizada por Piñera para bajar el desempleo de manera artificial:
«Una persona que hizo una clase particular de dos horas a la semana aparece como empleado en la nueva encuesta de empleo y en la antigua no aparecía si es que la mayor parte del tiempo, por ejemplo, la destinó a estudiar. Ese tipo de análisis hay que tener sobre la mesa”
Sólo en Chile en candidato puede mentir de manera tan descarada sin ser cuestionado. Ni hablar de que en cualquier otro país Piñera estaría preso por el escandaloso prontuario de delitos que acumula