Si usted es lector de nuestro carismático sitio de información, sabrá que hace tiempo venimos diciendo que Piñera será el próximo presidente de Chile. No porque tengamos una bola de cristal, mucho menos porque nos guste, es porque reconocemos dos hechos fundamentales: Primero que las elecciones se ganan con plata y la derecha cuenta con TODOS los recursos de los grandes empresarios, segundo por el monopolio ideológico de los medios masivos en Chile, quienes de manera sistemática alienan y asustan a las personas para defender los intereses de la clase dominante. Y como indican los estudios, mientras más miedo sienta la gente más votarán por la derecha.
¿A qué vamos con todo esto? En que los resultados de la IX Encuesta Nacional de Televisión 2017 reveló que el 85% de chilenos se informa a través de canales nacionales. Es decir, la gran mayoría del país está completamente desinformado. Una nota de Radio Cooperativa detalla:
A la hora de informarse sobre Chile, sus comunas y el mundo, más de un 80% de los encuestados dice hacerlo a través de la televisión abierta. El uso de redes sociales se duplicó respecto del estudio anterior con un 26% de las preferencias. Con respecto a los noticiarios, un 64% de los encuestados considera que su duración «está bien», mientras un 31% opina que son demasiado largos. En cuanto a su evaluación, existen varias críticas, siendo la principal, la sospecha de que «ciertas noticias no se dan a conocer». Por otro lado, lo positivo es que se observa una importante credibilidad: «informan adecuadamente sobre los acontecimientos de Chile». Un 41% de los encuestados dijo estar satisfecho con la televisión abierta, una cifra en aumento si lo comparamos con el 33% de 2011 y el 35% de 2017.
- Si el 85% del país se informa por la TV y estos todo el día muestran asaltos, portonazos, dicen que hay crisis económica y ponen a Chile como que estamos en Siria, adivinen por quién votará la gente…
- Si seguimos pensando que la democracia sólo se trata de «ganar votos» seguiremos tan cagados como siempre. TODO es política, partiendo por el ilegal monopolio de los medios de comunicación que tiene la derecha en Chile, que más encima siguen recibiendo la gran mayoría de los recursos del Estado. Mientras no se haga nada al respecto estamos derrotados antes siquiera de «jugar»