Los cuicos siempre nos han vendido el discurso del «esfuerzo personal» como una forma de esconder que todos y cada uno de los problemas de la sociedad están relacionados con la Desigualdad Social. El tema es que la meritocracia es una gran mentira, ya que los cuicos tienen su vida asegurada aunque sean unos vagos y retrasados mentales, mientras que los hijos de la clase trabajadora por mucho que se esfuercen, varios simplemente no logran superar la inequidad estructural del sistema económico capitalista.
Para ejemplo de lo anterior tenemos a los hijos de Sebastián Piñera, una tropa de tontitos millonarios desde que nacieron, que no han trabajo en su puta vida salvo para administrar la fortuna mal habida de su padre delincuente, y que desde chicos les enseñaron a robar, mentir y estafar. (Emitieron boletas falsas a SQM para evadir impuestos). ¿A qué vamos con todo esto? A que a la hija de Piñera la pillaron mintiendo y que el mermelada de weas de su hijo no sabe escribir.
- Sobre la hija: Que sea delincuente y mentirosa se lo debemos a su padre. La manzana jamás cae muy lejos del árbol
- Sobre el hijo: Esto nuevamente demuestra que los colegios cuicos en Chile no entregan una buena educación. Sólo son caros por la red de contactos que generan y para que los pequeños oligarcas sólo se junten con otros pequeños oligarcas
