Por si tenían dudas de que somos oficialmente el país del «pico en el ojo», donde a pesar de tener los sueldos más bajos de la OCDE, el precio de los alimentos, productos y servicios básicos en Chile están completamente inflados y son dignos de países europeos. Como ejemplo de lo anterior, una nota de El Desconcierto reveló que comprar paltas chilenas en el extranjero sale más barato que hacerlo en Chile.
Este martes el kilo de palta Hass subió sus precios y llegó a costar entre $4.200 y $4.500 en la Vega Central. Una mala señal para los consumidores, sobre todo considerando que ese precio representa 1,6% del sueldo mínimo del país, establecido en $276.000. Lo curioso es que sale más barato comprarla en el extranjero que en el mismo país. Así al menos lo confirma Valery Gálvez Rocha (27) quien trabaja y estudia desde hace un año en Berlín, Alemania.
“Lo más caro que compré la palta chilena aquí fue a 1.79 euros, no más que eso”, indica, tomando de referencia el precio de la unidad en el supermercado Aldi. No obstante, hay opciones más baratas: se puede conseguir entre 5 a 6 euros por kilo en el mercado callejero. ¿En plata chilena? Entre $3.649 y $4.379. Algo similar ocurre en París, Francia, donde Carla Bagú (25) compra la unidad de Hass a 1.19 euros. “Acá no la venden por kilo”, precisa.
De esto se trata el «Modelo Económico Chileno»: Como los sueldos en Chile son miserablemente bajos y el costo de los alimentos y los servicios básicos es más caro que los países europeos, (cuyos sueldos duplican y triplican los nuestros), obligan a las personas a endeudarse para poder sobrevivir. Y la deuda no es otra cosa que una forma de control social, ya que comprenderán que las personas preocupadas de sobrevivir no tendrán tiempo para cuestionar, reclamar y protestar por la violencia estructural que sufren por el sistema económico capitalista. Mientras tanto, el 1% es cada vez más rico y tiene cada vez más poder