Luego de mentirle a todo Chile asegurando que su viaje a Estados Unidos había sido en calidad de Ministro, incluso justificándolo de que «le daba prestigio a Chile», tras ser desmentido por los propios ex alumnos de Harvard, no le quedó otra que reconocer que utilizó dineros públicos para financiar un viaje personal y pagar de su bolsillo parte del costo del mismo. Al respecto, el sinvergüenza declaró:
“Estoy completamente convencido de haber actuado correctamente, de acuerdo a la forma en que he obrado en mi vida y en mi trayectoria de servicio público. Sin embargo, considero que este tema está distrayendo innecesariamente mi atención y la del Ministerio de Hacienda de los objetivos fundamentales de nuestra labor. Quiero concentrarme sin distracciones en la recuperación de la economía chilena, el crecimiento, la inversión, la generación de empleos de calidad y la mejora de nuestras finanzas públicas”.
Si usted roba un chocolate en el supermercado, lo pillan y ofrece pagarlo ¿los guardias lo dejan ir? NO. Lo que hizo el delincuente de Larraín se llama malversación de fondos públicos, es corrupción y la única opción que le queda es renunciar