Mientras en Chile los políticos de derecha y fanáticos religiosos hacen las leyes de acuerdo a sus propias creencias religiosas, en Argentina el ejemplo lo dio el Diputado católico José de Mendiguren, quién apoyó la despenalización del aborto a pesar de ser contrario a sus convicciones personales:
Soy católico, y tengo convicciones profundas sobre la vida y la ética. No estoy de acuerdo con el aborto. Nunca lo estuve ni lo estaré. Pero mis convicciones son mías, y mi responsabilidad como legislador nacional es legislar para toda la sociedad.
— Vasco de Mendiguren (@dmvasco) 13 de junio de 2018
El debate ha cambiado mi posición original, contraria a la legalización del aborto. Votaré a favor de la ley. Mis convicciones son mías, guían mi vida. Pero mis convicciones no son la verdad. La verdad es lo que ocurre y mi obligación como diputado es trabajar para transformarlo.
— Vasco de Mendiguren (@dmvasco) 13 de junio de 2018
Mi voto será un voto a favor de la salud pública. Las creencias personales deben subordinarse a las iniciativas vinculadas con la salud pública y las políticas que pueden garantizarla. Esa es la razón por la que acompañaré con mi voto este proyecto
— Vasco de Mendiguren (@dmvasco) 13 de junio de 2018
Diputado argentino, José de Mendiguren, empresario, católico y contrario al aborto que cambio su voto a favor. Dijo: «Mis convicciones personales no pueden estar por arriba de una necesidad de una gente que me votó para que defendiera sus derechos». #AbortoLegalYa #AbortoSeraLey pic.twitter.com/eT3iO4g286
— Vagabundo ilustrado (@mushkilgusha783) 14 de junio de 2018
- Jamás se ha tratado de estar a favor o en contra del aborto, se trata de elegir que las mujeres lo hagan de manera clandestina y mueran en el proceso, o que lo hagan de manera segura y gratuita. No es un tema valórico, es un tema de Salud Pública, y los «Pro Vida» están a favor de matar mujeres
- ¿Se imaginan si todas las personas religiosas fueran así? No habría problemas. Por eso es que no podemos permitir que los canutos empiecen a entrar al Congreso ya que son completamente fascistas. Si fuera por ellos los homosexuales deberían morir y las mujeres ser tratadas como incubadoras sin derechos