Declararse «pinochetista» y defender la Dictadura Cívico-Militar, literalmente es estar de acuerdo con el asesinato sistemático de opositores políticos, de torturar personas cometiendo los vejámenes más terribles que se puedan imaginar y de robarse el Estado completo para beneficiar a los más ricos. Dejando esto en claro, consultada por los dichos de Camila Flores quien llamó a la Derecha a «reconocer su pinochetismo», la Ministra vocera de Gobierno, Cecilia Pérez, aseguró que defender el genocidio de la Dictadura «era parte de la diversidad y no debía incomodar»
“Cuando uno cree en la diversidad, en el respeto a la diferencia, como lo cree nuestro gobierno y coalición no puede existir incomodidad. Vemos la diferencia como una virtud, no como una dificultad (…) la mayor fortaleza que hemos aprendido en Chile vamos como coalición este año es crecer con diversidad. Es establecer y consolidar una cultura del respeto a la diferencia”.
- Respetar la diferencia y promover la tolerancia se puede argumentar cuando a alguien le gusta la pizza con piña o las empanadas con pasas. Declararse Pinochetista y defender la Dictadura es estar de acuerdo con un genocidio que asesinó y torturó a miles de personas, incluyendo a niños y mujeres embarazadas
- Esta semana quedó más que claro que la llamada «nueva derecha» «derecha liberal y «centro derecha» jamás existieron. Violar los Derechos Humanos está en sus genes, desprecian la Democracia, odian a la Clase Trabajadora y están desesperados por imponer una nueva Dictadura