El periodista de Mega José Luis Repenning, famoso defensor de los empresarios y enemigo de los trabajadores, se las quiso dar de choro y a pito de nada, salió en defensa de su cagada de Canal tras ser cuestionado por (asco) Matías Walker (vómito), por la evidente responsabilidad de los canales de TV en el aumento del VIH tras negarse durante años a emitir las campañas que se hacían. Cuento corto, quedó como un soberano aweonao ya que efectivamente Mega también se negó a emitir spots contra el VIH cuando él ya trabajaba en el Canal.
Tres canales de la televisión chilena resolvieron boicotear la sexta campaña del sida lanzada por el gobierno, compuesta por cuatro spots televisivos y que se inicia esta noche. Se trata de las estaciones más cercanas a la Iglesia Católica, Canal 13, Mega y UCV TV, y la primera de ellas ya anunció su decisión de emitir su propia campaña de prevención de la enfermedad.
Canal 13 -al igual como ocurrió en 1997 con la anterior campaña estatal- oficializó su decisión de no emitir los spots, la declaración del canal asegura que los spots “no aluden ni alertan respecto a las consecuencias negativas que para las personas y sus familias pueden representar conductas sexuales promiscuas”. Según Canal 13, de este modo, se “está validando un patrón de conducta que tiene diversas consecuencias negativas para la salud mental y el desarrollo social de la población, y que van más allá del contagio de la enfermedad. Por ejemplo, los efectos negativos que la infidelidad puede generar en el matrimonio y la familia”.
Por su parte, Mega argumentó que el contenido de los avisos no corresponde a la línea editorial de la estación, misma explicación dada en 1997. Alfredo Escobar, director ejecutivo de la casa televisiva de propiedad de Ricardo Claro, agregó que la estación no ha contemplado exhibir una campaña paralela. «Por el momento no vamos a tomar este tema», reveló. Sin embargo, pese a que las dos casas televisivas -Mega y Canal 13- nuevamente se alinearon en el rechazo a una campaña de salud pública, hay matices en el comportamiento de ambas. Mientras la estación católica otorga cobertura periodística a este tema, el canal de Ricardo Claro simplemente lo omite.
- El día que los periodistas chilenos defiendan al pueblo y a no a los grandes empresarios será cuando empiece a cambiar esta cagada de país
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