Nueva semana, nueva oportunidad en que el diputado evangélico de RN Eduardo Durán y su padre Obispo son noticia por su corrupción y por la inmoralidad de hacerse millonarios robándole a los pobres. En esta oportunidad, un artículo de El Mostrador reveló que el Obispo Durán le regaló más de 100 millones de pesos a su hijo para financiar su campaña, dineros que por supuesto, venían del diezmo de la Iglesia. Parte del artículo señala:
El diputado Eduardo Durán se inició en las pistas electorales en el 2009 con su candidatura a diputado por RN en la Región del Bío-Bío, contienda en que el 8,81% de los votos que obtuvo no le alcanzó para acceder a un escaño en el Congreso. Su premio de consuelo fue el cargo de gobernador de la Provincia de Ñuble, que ejerció durante todo el primer Gobierno de Sebastián Piñera. Ya en esa época, aparte de los $4 millones mensuales de su sueldo como gobernador, Durán recibía «mesadas» de su padre por un total de $59 millones entre 2010 y 2014, según informó un reportaje de «Informe Especial» de TVN.
Tras la derrota de la derecha en las presidenciales de 2013, actual diputado de RN siguió posicionándose como figura pública. Inició un emprendimiento de agua purificada junto a su hermana, el que fue financiado por su padre y que finalmente fracasó; fue contratado por la Primera Iglesia Metodista Pentecostal y llegó a recibir un sueldo de $23 millones mensuales. En 2014, creó la fundación Causa Común, junto a otro militante de RN y autoridad evangélica, Cristián Nieto, que basa su trabajo en la intervención de recintos carcelarios, actualmente dirigida por Marjorie Vásquez y Carolina Durán, hermana del diputado.
A principios de 2016, la Fundación Causa Común comenzó a desplegar una nueva estrategia de posicionamiento en medios, principalmente a través de columnas de opinión y entrevistas realizadas a Durán, y publicadas en la sección pagada «Especiales» del diario La Segunda. Durán registra al menos 19 publicaciones entre el 31 de diciembre de 2015 y el 27 de enero de 2017, en las que se posiciona como un líder de opinión, ya que no solo habla de temas acotados a la situación de la cárceles y los reos, sino que aborda distintos asuntos contingentes, como el aborto en tres causales. Según las tarifas del año 2018, la publicación de un publirreportaje de media plana en blanco y negro tiene un valor de $969.410, valor al que se le debe agregar $338.705 si se quiere una nota mediana a color. En el caso de que sean publirreportajes de una plana completa, el valor base aumenta a $1.615.684, además de un monto de $483.864 por publicar en color, más el ajuste por la sección en donde se publica. Según esta tarifa, 19 publicaciones de media página a color tienen un costo total mínimo de $25 millones, solo en el año 2018. En 2017, Eduardo Durán resultó electo diputado por el D13 con el 8% de los votos.
Su triunfo dejó un sabor amargo en Chile Vamos, pero también en un sector importante de Renovación Nacional, ya que desplazó a Macarena Donoso (6%), la carta prioritaria del partido para ese distrito, esposa del analista político Patricio Navia y una de las protegidas por el senador Manuel José Ossandón, quien participó activamente en su campaña. Quienes disputaron las elecciones en ese distrito recordaron que la campaña de Eduardo Durán siempre fue objeto de “sospechas” por lo elevado de sus gastos, aunque todo el proceso fue aprobado por el Servel. El parlamentario centró su campaña en una de las comunas más vulnerables del distrito, Lo Espejo, donde “era impresionante la cantidad de gigantografías y palomas en las casas”, según recordó uno de sus contendores. Pero lo que más impactaba era la cantidad de merchandising y artículos que regalaban en las ferias libres. La campaña de Durán registra ingresos y egresos por $64.750.617 en el Servel. De esos, $43.964.205 corresponden a aportes del propio candidato, recursos entregados por RN y donaciones con o sin publicidad. El partido le entregó $4 millones en efectivo y $4,9 millones en especies, el diputado se autodonó $14.726.776.
- Con esta debacle los evangélicos fascistas quedan inhabilitados de por vida para hablar de «valores» y «moral» en su obsesión para obligarnos a vivir bajo sus dogmas conservadores
- Paremos el webeo, hace rato que las iglesias deberían estar pagando impuestos, primero porque son un negocio, segundo porque no traen NINGÚN bienestar a la sociedad. Para ejemplos basta ver a los Durán que se hicieron millonarios robándole a los pobres