Por si tenían dudas de que los fachos son personas horribles, y que todo su discurso «provida» y de «los niños primero» siempre ha sido una farsa, la multimillonaria ultraderechista Lucy Ana Avilés, casada con uno de los delincuentes herederos de Walmart, le quitó el financiamiento a una fundación que ayuda a niños vulnerables, sólo porque su director criticó a Piñera.
☕️#RatPack | @pcomandari: «La Fundación Zomalab, ligada a Benjamin Walton y Lucy Ana Avilés, cuyo brazo financiero en Chile es Fundación Viento Sur, decidió frenar las donaciones a la Fundación para la Confianza, dedicada a atender a niños vulnerados».
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— Tele13Radio (@Tele13_Radio) November 20, 2019
Despreciable: @lucyanaah (Lucy Ana Aviles) quita financiamiento a “Fundación para la Confianza” (víctimas de abuso sexual infantil) por motivos POLÍTICOS. pic.twitter.com/ZOquyLBt7E
— Ursula Eggers ? (@ursulaeggers) November 21, 2019
LucyAna se picó y frena aportes a Fundación para la Confianza, fundación dedicada a la prevención del abuso y el maltrato infantil ? pic.twitter.com/KNXDeZwSZl
— El Censelio (@Censelio) November 20, 2019
Cuando se frena el financiamiento a una fundación por temas políticos, es cuando la “filantropía” es mero lavado de imagen.
Lo que importa es el rol que cumpla, y lo que hace Lucy Ana Avilés (@lucyanaah) es finalmente quitarle financiamiento y ayuda a niños vulnerados. https://t.co/IQ3bqrjG9V— Javier Valdivieso (@jlvaldivieso96) November 20, 2019
La filantropia de Lucy Ana es doble estándar, tener un instrumento de lavado de imagen, ahora vemos su mejor cara https://t.co/htErIJH4zF
— Hilda San Martin (@hsanmv) November 20, 2019
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Aquí vemos el gran problema de la caridad y la filantropía, a los más ricos no les interesa mejorar la sociedad, sólo les interesa lavar su imagen y comprar opiniones políticas. Un país que funciona en base a donaciones no llegará a ninguna parte, lo que se necesita son políticas de redistribución de la riqueza, o lo que es lo mismo, que los ricos paguen los impuestos que corresponden. Donde a modo de ejemplo, Lucy Ana y su esposo evadieron 50.000 MILLONES DE PESOS EN IMPUESTOS