Demostrando nuevamente que Libertad y Desarrollo no es un “centro de estudio“, sino que son terroristas neoliberales al servicio de los grandes empresarios. Tras decir la brutalidad que había que fumar para eliminar el Coronavirus, (reciben dinero de las tabacaleras para decir esas estupideces), ahora defendieron que las grandes empresas puedan repartir utilidades entre sus accionistas tras quitarle el sueldo a los trabajadores, tal como lo acaban de hacer Cencosud y Latam.
Otra razón más para buscar una nueva constitución https://t.co/25DrWPpyQE
— Sebastián Esnaola S. 🏘 #QuedateEnCasa (@sesnaola) May 7, 2020
Todo es inconstitucional 🤣
PD: no sabía que la Ley de SA no puede ser modificada por otra norma del mismo rango. Cosas que se aprende por acá. https://t.co/GhZxvi03zc— Gabriel Osorio (@ALeverkuhn83) May 7, 2020
Unos de los principales centros de pensamiento de la derecha en Chile. Hoy dirigido por la ex Ministra de Educación Marcela Cubillos. Juzgue usted. https://t.co/gkbcfIhS3p
— Gabriel Boric Font (@gabrielboric) May 7, 2020
Otra oportunidad para entender lo que quieren decir con eso de que la Constitución no le interesa a la gente. Claro, el "estallido" no tiene nada que ver con que las mismas empresas que alegan verse imposibilitadas de pagar a sus trabajadores repartan millonarios dividendos. https://t.co/XJCBDUUN2b
— Fernando Atria (@fernando_atria) May 7, 2020
La campaña por el apruebo va como avión. https://t.co/dEBa4teP3k
— Pato (@PatoGamblin) May 6, 2020
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- Recibir sueldo también está garantizado en todas partes y AÚN ASÍ SE LO QUITARON A LOS TRABAJADORES… Que más encima argumenten que “es contrario a la Constitución de Pinochet” sólo demuestra por qué debemos votar APRUEBO en el plebiscito del 25 de octubre
- Libertad y Desarrollo, es uno de los grupos que hay que hacer desaparecer en el nuevo Chile. Ni siquiera son de Derecha, son terroristas neoliberales que representan un peligro para la sociedad. En cualquier otro país del mundo no serían tomados en cuenta ya que sus posturas son absurdas y no tienen sustento alguno. Sólo en una pesadilla neoliberal como Chile pueden ser tomados en cuenta