Si usted no conoce a Andrés Velasco, la mejor manera de definirlo es “el Andrés Allamand de los tecnócratas”. Un fracasado al que no lo pesca nadie, que fue expulsado de la política por recibir sobornos de Penta, y que al ser un tecnócrata duro no se puede calificar ni de izquierda ni de derecha, ya que más bien es un fascista anti-pobres.
Para demostrar lo anterior, escribió una insultante y jocosamente “poco técnica” columna indignado por la aprobación del Retiro del 10%, tratando de “pataleta” el hambre de la gente, diciendo que es “populista” gobernar para el pueblo, y sacando la amenaza de que “nos íbamos a convertir en Venezuela / Cuba / Filipinas / Turquía, una campaña del terror obsoleta que sólo los burgueses sin calle pueden creer que el pueblo va a creer.
Andrés ve una línea directa entre el 10% y Duterte o Erdogan, ponte tú, todo culpa de la izquierda y las redes sociales . Porque el análisis técnico, desapasionado, es lo suyo. pic.twitter.com/97Iea4eeZd
— El Floro (@floro_ceballos) July 25, 2020
Andrés Velasco se enteró de la renuncia de Hernán Larraín Matte, y se dijo: Haré una columna digna de un liberalismo elitista, sin calle y pedante, a ver si me dan la presidencia de ese club social que se auto define “partido” y que tiene por nombre Evópoli. Y bueno, salió esto: pic.twitter.com/iVzqPWER6z
— Vagabundo ilustrado (@vagoilustrado) July 25, 2020
Infantilizar ha sido una de las «pulsiones» básicas del poder para descalificar y controlar. Lo hizo la corona con los pueblos originarios; en EE.UU. con el uso de «boy» para referirse a los afro-americanos. La baja preparación intelectual de los economistas no deja de sorprender pic.twitter.com/T9SZOu5J8r
— Cristián Castro G. (@cccastrog) July 25, 2020
Nos queda claro que Velasco, ministro de hacienda de Bachelet, siempre fue de derecha, cierto? CIERTO? pic.twitter.com/cxlGC9zWBZ
— El novio de Jaime (@elnoviodejaime) July 25, 2020
Lo que le discutiría a la columna es que localiza el descrédito de la política en medidas contra la pandemia q considera populistas, y no en los años de alienación que llevan al 18 O. El largo plazo económico para adelante es visible, el largo plazo político para atrás no. https://t.co/RSxnmcMKiJ
— Espelunco (@Espelunco) July 25, 2020
Insensible, casi cruel columna de Andrés Velasco en Elmer contra del retiro del 10%: «La pataleta» se llama… ¿al hambre?
Carente de sentido común, tecnocrática y q refleja muy bien la ausencia de criterio de realidad de los economistas en estos dias.
Se nota q no le falta nada— Axel Callís R. (@AxelCallis) July 25, 2020
Evasor de impuestos local dice que columna contra el populismo es buena, olvidando que casi fue candidato presidencial solo por ser ministro cuando un equipo técnico rescató a unos mineros. https://t.co/67eHxZ04t6
— kiubert (@qbeeert) July 25, 2020
Andres no somos niños para hacer pataletas.
Y no somos niños, para olvidar tus almuerzos por 20 millones de pesos con los Penta.
Cariños, Cristobal.
— Cristóbal Osorio (@baltocris14) July 25, 2020
Buen momento para recordar que la opinión de Andrés Velasco me es tan intrascendente como la de Soledad Alvear o Ricardo Lagos.
— Francisca Solar (@FranSolar) July 25, 2020
Leo la columna de Andrés Velasco en El Mercurio, llena de desprecio por la gente y amor por la élite tecnocrática que es servil al poder económico, y veo en él a una síntesis de los males de Chile.
— Artemio Lupin (@artemiolupin) July 25, 2020
Fácil calificar de pataleta una demanda ciudadana por comida e insumos básicos, desde una bien acomodada posición de privilegio.
— Mauricio Tapia (@MauricioTapiaR) July 25, 2020
La columna de Andrés Velasco es “lo que hacen ellos, se equivocan; lo que alertamos nosotros, no nos equivocamos”.
¿Quién hace una pataleta?
— Aguirrebello (@aguirrebello) July 25, 2020
El nivel de insensibilidad de Andrés Velasco es sorprendente. Califica de “pataleta” el clamor de la ciudadanía por acceder a su propio dinero para hacerle frente a estos tiempos difíciles. Es un clásico ejemplo de cuando tus privilegios te marean hasta la ceguera.
— Chascas Valenzuela (@elchascas) July 25, 2020
La columna de Andrés Velasco en el Mercurio es un ejemplo de la élite egoísta, moralista y reduccionista de las discusiones políticas y democráticas. Desde sus mansiones y privilegios, vienen a pontificar cómo deben ser las discusiones sociales.
Según ellos, el pueblo no sabe.— Constanza Valdés C. (@conivaldesc) July 25, 2020
Andrés Velasco fue, en los hechos, Jefe de Gobierno entre 2006 a 2010, y por ende responsable político de fracaso social de ese período; intentó crear partido político y fracasó vergonzosamente; protagonizó costosísimos Pentalmuerzos con empresarios corruptos. Hoy debiera callar.
— FernandoMunozL (@fernandomunozl) July 25, 2020
Personalmente no me convence columna de A. Velasco. 1°, xq dimensión de discusión del 10% excede lo mera% técnico. Y 2°, xq hay toda una corriente de estudio del populismo (Müller) q asocia el fenómeno a tecnócratas en relación a antipluralismo (solo mi opción es la correcta).
— Rodrigo A. Rettig V. (@RodRettig) July 25, 2020
Lo que hoy ve la elite despectivamente y erróneamente como «populismo» es la pérdida de poder de esta y el aumento de poder de la ciudadanía. El 10% fue democracia directa digital, hoy el político debe aprender a seguir mandatos de sus votantes
— Juan Carlos Garcia (@juanyinyang) July 25, 2020
Andrés Velasco es un desastre en política, será recordado como un ex ministro que perdió una elección, que fundó un partido en cuya primera interna hubo fraude,sus integrante se pelearon y el partido desapareció. Ni Allamand suma tantos fracasos seguidos
— Natalia (@Natacisterna) July 25, 2020
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- Que a estas alturas sigan con las amenazas de “Chilezuela” que nadie cree y sigan tildando “populista” todo lo que beneficia al pueblo y no a ellos, sólo refleja la pobreza intelectual extrema de la elite chilena. No sólo no tienen argumentos, son abiertamente tontos al creer que el pueblo va a seguir creyendo en sus amenazas
- Lo que en el fondo les molesta a tipos como Andrés Velasco, Hernán Larraín y toda la tropa de cuicos de mierda que jamás han pasado hambre, es que el pueblo despertó y está presionando a los parlamentarios para que legislen a favor de sus intereses. Los grandes empresarios compraron políticos por décadas para hacer las leyes a su medida y jamás les molestó, lo que les genera ira es que con un pueblo despierto ya no pueden hacerlo