En el contexto del sospechoso aumento de los “atentados” en La Araucanía, recalcamos lo de “sospechoso” ya que los mapuche no tienen nada que ganar con ellos, los únicos que ganan son el Régimen de Piñera y durante los dos meses que duró Estallido Social no hubo NINGÚN ATENTADO, al hecho de que hemos visto a Carabineros reconociendo montajes contra los mapuche y empresarios condenados por hacer falsos atentados, recordaremos además que los latinfundistas CONTRATAN SICARIOS para atacar a los mapuche. Este es el caso de Broder Redlefsen.
Como una verdadera organización mafiosa operó esta tarde un grupo de individuos en Paillaco, luego de concretarse la detención del propietario del fundo El Refugio, Broder Redlefsen, por daños y por violar la medida cautelar que le impedía aproximarse al predio ocupado por comuneros mapuche en Itropulli. Una vez que Redlefsen y el otro sujeto ingresaron a la Subcomisaría, la tensión se trasladó hasta el centro de la ciudad, cuando los miembros de la comunidad mapuche comenzaron a identificar a personas que transitaban vigilantes en una camioneta, incluso uno de ellos observaba los movimientos en la esquina de la subcomisaría.
Una vez descubiertos, a eso de las 18 horas, los sujetos se trasladaron hasta la calle Camilo Henríquez con Arturo Prat, donde descendieron de la camioneta Chevrolet Dimax Doble Cabina, y con sus rostros cubiertos con pañuelos y pasamontañas, intentaron agredir con palos al grupo de comuneros encabezados por la dirigente Verónica Henríquez. Transeúntes actuaron en su defensa.
Minutos después, Carabineros logró ubicar la camioneta y detuvo a sus ocupantes, quienes al cierre de esta nota – las 21.35 horas – siguen al interior de la Subcomisaría. En el pickup del vehículo fueron encontrados palos, herramientas y un saco con piedras. En tanto, bajo el asiento trasero, Carabineros halló un gorro pasamontañas y otros elementos contundentes. En suma, un total de 6 detenidos que permanecen siendo interrogados al interior de la Subcomisaría por el capitán Jorge Cárcamo, quien lideró el exitoso operativo policial que contó con refuerzos provenientes de La Unión.
Dos de los tres hombres que el año pasado amenazaron encapuchados y con palos a la comunera mapuche, Verónica Henríquez, le pidieron disculpas públicas y reconocieron haber cumplido órdenes del propietario del Fundo El Refugio, Broder Redlefsen. El hecho se registró en el tribunal de Paillaco, en el marco de un acuerdo reparatorio, tras una querella por amenazas y desorden público, interpuesta por la Intendencia. En la oportunidad, Ángel Custodio Villagra Ferrada señaló: “pido disculpas a usted y a la comunidad. Si cometimos un error, don Broder fue quien mandó esto; en ningún momento fue voluntad de nosotros”. Por su parte, Juan Ignacio Fernández Flores agregó: “yo igual le pido disculpas a la comunidad, si yo mismo cometí un error, ‘buta’, pido mil disculpas a todos y usted sabe que fue don Broder quien nos mandó a nosotros”.
Verónica Henríquez calificó la situación como un importante avance en el proceso reivindicatorio que iniciaron en noviembre de 2013. “Hoy quedó en evidencia la verdad y se comprobó que Broder Redlefsen mandaba y pagaba a los sicarios. Ellos confesaron que él canceló para que nos hostigaran y me amedrentaran y amenazaran de muerte”, expresó.
A fin de mes, la comunidad Román Millapán volverá a encontrarse con Redlefsen en el tribunal por la querella criminal contra quienes resulten responsables de las lesiones graves sufridas por un comunero y los daños causados a las viviendas, oportunidad en que esperan que las declaraciones de Villagra y Fernández sean una de las pruebas importantes contra el ciudadano alemán.