A propósito del sospechoso aumento de “atentados” en La Araucanía, recalcamos lo de sospechoso ya que durante los 3 meses que duró el Estallido Social curiosamente no hubo NINGUNO, recordaremos el caso de los empresarios que fueron descubiertos haciendo un falso atentado para culpar a los mapuche y cobrar un seguro de 30 millones de pesos. Una nota de Economía y Negocios detalla:
Un empresario y su cómplice quemaron auto Mercedes Benz y luego denunciaron que tres encapuchados armados les habían robado el vehículo para incendiarlo. Dos personas fueron formalizadas ayer por los delitos de incendio y fraude de seguros a raíz de la simulación de un ataque incendiario en contra de un automóvil Mercedes Benz modelo ML 250, avaluado en $33 millones, ocurrido en julio de 2014.
El vehículo pertenecía a una sociedad de inversiones y transportes de la cual Carlos Uribe Troncoso (44) es representante legal. El 4 de julio de 2014, Uribe viajó junto a Carlos Fuentes Vásquez (38) desde Chillán a Vilcún a bordo del Mercedes Benz. Según denunciaron en esa fecha, cuando transitaban por un camino lateral de la ruta que une Vilcún con la localidad de Cajón fueron interceptados por supuestos encapuchados que los obligaron a descender para robar el vehículo, el cual más tarde fue hallado completamente quemado. El ilícito quedó caratulado como un robo con intimidación. Carlos Uribe cobró el seguro que había contratado tres meses antes a Renta Nacional Compañía de Seguros, que canceló al empresario 837 UTM (unos $37 millones al valor actual).
Durante la investigación encargada por el Ministerio Público a la PDI surgieron antecedentes poco comunes en relación con los hechos de violencia rural que ocurren en La Araucanía. Los imputados tampoco pudieron sustentar el porqué de su presencia en ese sector, ya que argumentaron que en un inicio viajaban rumbo a La Unión y que de improviso debieron ir a dejar dinero a un chofer de la empresa de Uribe que se encontraba en Vilcún. Los imputados declararon que fueron atacados por tres encapuchados que vestían mantas, que entre ellos se comunicaban en una lengua que no reconocieron y que les ordenaron qué hacer a través de señas.
Según el fiscal Miguel Ángel Velásquez, «los tráficos telefónicos, la ubicación y la revisión de las cámaras de seguridad de diversos peajes permitieron establecer que los hechos no fueron como los relataron, sino que hubo un concierto previo destinado a cobrar el seguro». La jueza Marcia Castillo decretó tres meses de investigación e instruyó las medidas cautelares de arresto domiciliario total (que ambos cumplirán en Chillán) y arraigo nacional. Además, se fijó una audiencia para el 24 de febrero para iniciar un juicio abreviado.
Esta es la segunda investigación por este tipo de hechos que se desarrolla en La Araucanía desde que existe la actual justicia penal. El delito investigado anteriormente terminó con la condena a 400 días de pena remitida contra Hugo Castro y su primo Orli Martini. El 18 de junio de 2014, Hugo Castro condujo su camión Mercedes hasta el sector rural de Caivico, en Padre Las Casas. De acuerdo a la investigación, el hombre fue acompañado en otro vehículo por su primo Orli Martini. En el lugar, Hugo Castro roció combustible al camión, e inició el fuego. Al día siguiente, Martini reportó el incendio como intencional, e inició los trámites para que BCI Seguros le pagara $15 millones, entrega que se hizo efectiva meses después.