La Derecha chilena, como buenos empelados a sueldo de los Grandes Empresarios, en plena pandemia se encuentran en una campaña desesperada para reducir la cantidad de Diputados. Sus “argumentos” y “justificaciones” por supuesto, como es su costumbre, son todas completas mentiras. Ya que lo único que les interesa es volver al desastroso y antidemocrático Sistema Binominal para volver a secuestrar la Democracia por secretaría, algo que como pueblo simplemente no podemos permitir.
Porque si fuera por ahorrar dinero, tenemos a las Fuerzas Armadas gastando 20 veces más en juguetitos de guerra que están acumulando polvo. Qué decir de los grandes empresarios, los mismos que la Derecha constantemente defiende, que son los que menos pagan impuestos de la OCDE. Podemos seguir dando cientos de ejemplos de cómo el Estado podría ser más eficiente, pero a la Derecha lo único que le interesa es reducir el Estado al mínimo, ideología que no puede ser permitida, menos después de la Crisis del Coronavirus que demostró que el capital no nos va a salvar, nos va a salvar un Estado fuerte y un sistema de salud público robusto.
¿Esto quiere decir que no hay que tocar el Congreso? Por supuesto que no, pero reducir el número de diputados a los que habían en 1990 no tiene ningún sentido estadístico ya que ahora tenemos 5 millones de habitantes más. Tener menos diputados reduciría la representatividad, y lo único que lograría sería es aumentar la corrupción, ya con menos parlamentarios será mucho más fácil que los grandes empresarios los sobornen. Además que las campañas son carísimas, adivinen quién tendría la ventaja absoluta ya que son financiados por los grandes empresarios… Si, la Derecha.
Lo que hay que hacer es eliminar el Senado y establecer un Congreso Unicameral. Que no sólo ahorraría incluso más dinero que reduciendo los Diputados, además fortalecería la Democracia ya que evitaría que los proyectos queden congelados en el Senado como suele ser habitual, y aumentaría el control civil sobre los representantes ya que sabríamos exactamente cómo votan. No como ocurre actualmente que entre tantas comisiones mixtas los proyectos sufren cientos de modificaciones y al final los proyectos que se aprueban no tienen ninguna relación con los que se presentan.
El desastroso Régimen de Piñera destrozó la confianza en las instituciones y la única forma de reponerla es aumentando la transparencia, la fiscalización y la Democracia. Reducir el número de Diputados como quiere la Derecha va en el sentido totalmente opuesto, algo obvio considerando que TODO lo que haga Derecha va directamente en contra del pueblo. Y si nos apuran, para fortalecer aún más la Democracia también hay que acabar con el sistema presidencialista extremo de Chile, Piñera demostró que no podemos correr nuevamente el riesgo de tener a un sociópata de presidente y no podamos hacer nada para sacarlo. Un Congreso Unicameral y una Democracia Parlamentaria es la meta a la que debemos apuntar.