La historia es la siguiente: La diputada Camila Vallejo, en conjunto con otras parlamentarias de la Nueva Mayoría y el Frente Amplio, presentaron un proyecto para rebajar el quórum de 2/3 en la Convención Constitucional . La mayoría de las críticas se están centrando en que “ése no era el acuerdo” o que “éso no fue lo que se votó”, argumentos pobres con respecto a los dos problemas de fondos del proyecto: Darle cuerda a una Derecha que está en el suelo y que si la Derecha logra el 50% + 1 CAGAMOS.
REVIVIR A LA DERECHA
La Derecha chilena acaba de sufrir su mayor derrota ideológica en la historia tras perder OCHENTA A VEINTE en el plebiscito. Pero este innecesario proyecto se encarga de revivirlos ya que cambia el foco de la noticia y apunta directamente a Camila Vallejo y al PC que están siendo destrozados transversalmente. ¿En serio no fueron de capaces de anticipar esta reacción? Lo más absurdo es que como el proyecto jamás será aprobado se ganaron un linchamiento público totalmente evitable. Cómo será que hasta Piñera no esperó ni un segundo en colgarse de este proyecto para revivir.
LA CONSTITUCIÓN NO ES UN PROGRAMA DE GOBIERNO
Si miramos a los países desarrollados, sus constituciones son mínimas y sólo se dedican a establecer criterios básicos. Porque no debemos olvidar lo esencial: Las Constituciones no son programas de Gobierno. Esa es precisamente la gracia del 2/3 con hoja en blanco, ya que llamaba a llegar acuerdos para lograr mínimos comunes, donde todo lo que no quede adentro de la Constitución, ahí si podrá ser definido mediante leyes comunes y corrientes.
¿SI LA DERECHA LOGRA EL 50% CAGAMOS?
A todo lo anterior debemos considerar el principal riesgo de este ridículamente torpe proyecto: ¿Y qué pasa si la Derecha logra el 50% + 1 y hace una Constitución a medida de los Grandes Empresarios incluso más que la Constitución de Pinochet? Quedaremos PEOR QUE ANTES. Las Constituciones son importantes porque definen el alma de los países, por lo mismo, volvemos a repetir, no pueden ser programas de gobierno… De ningún sector.