En Alemania, a principios de este año, militantes del partido de centro derecha de Angela Merkel, en conjunto con los liberales, pactaron con la ultraderecha por primera vez desde el fin del nazismo para que no ganara un socialista en el estado de Turingia. ¿El resultado? Un escándalo sin precedentes, la propia Merkel tuvo que intervenir calificando el hecho como inaceptable, y todo terminó con la renuncia de Thomas Kemmerich un día después de ser electo. ¿Por qué ocurrió esto? Porque en Alemania la centro derecha es democrática y tiene un ferreo cordón sanitario sobre el fascismo y su discurso de odio, discriminación, populismo e intolerancia.
Mientras tanto en Chile, Mario Desbordes, que se supone era uno de los principales críticos al partido fascista de José Antonio Kast diciendo textualmente que representaban lo peor de la política, ahora llamó a pactar con ellos sin siquiera arrugarse. Y por si quedaban dudas de la peligrosa escalada fascista de Desbordes, en contra de toda la evidencia también apoyó que todas las personas tengan armas, dejando en claro que su modelo de país es el desastroso Estados Unidos de Donald Trump.
Lo que pasó hoy día en Estados Unidos sirve de advertencia para Chile: La Derecha representa un peligro para la Democracia. En EE.UU un grupo de fachos se tomaron el congreso para defender a un presidente de ultraderecha que no quiere aceptar su derrota. En Chile ya los vimos golpeando a personas en las marchas del RECHAZO, amenazando de muerte a una fiscal, les pillaron un arsenal de guerra, y el Régimen de Piñera ni siquiera se querelló contra ellos… Lo volvemos a repetir: La Derecha representa un peligro para la Democracia, más aún ahora que pactaron con el partido fascista de José Antonio Kast