Partamos de la base que la idea de Daniel Jadue sobre crear un “consejo ciudadano” para revisar la línea editorial de los medios es una estupidez. Y no lo sacaron de contexto, no fue una frase inventada por un medio de ultraderecha, fue lo que dijo textualmente en el debate realizado la semana pasada. Dicho lo anterior, en su columna sobre el tema que escribió para La Tercera, si bien acierta en varias cosas, Daniel Matamala también se equivoca en unas cuantas más.
Comparar a Jadue con Juan Sutil siendo que este coaccionó directamente a un medio quitándole los auspiciadores, (y amenazando indirectamente al resto para que informen como él quiere), se equivocó también en equiparar las redes sociales con los medios, (una cosa es que hayan democratizado la información pero siguen siendo incomparables), y en citar a Suetonio para decir que “en un Estado verdaderamente libre el pensamiento y la palabra deben ser libres”. Algo que no tiene sentido en los tiempos que corren con tanta desinformación y discursos de odio. ¿Vamos a dejar que los nazis promuevan asesinar a los que no son como ellos? ¿Hay que darle tribuna a los antivacunas y a los fanáticos religiosos? La libertad de expresión SI tiene límites.
Sin embargo, el mayor error de Matamala es no reconocer que estamos lejos de tener una verdadera libertad de prensa. Algunos ejemplos: Durante el Estallido Social los medios criminalizaron las protestas y silenciaron los abusos policiales a tal punto que la gente fue a protestar a los canales. Canal 13 fue cómplice directo del montaje de Camilo Catrillanca. Los canales le siguen dando tribuna preferente a la Derecha a pesar de ser barridos en 3 elecciones seguidas. La Tercera y El Mercurio le siguen dando espacio a la ultraderecha para publicar vergonzosas columnas que no pasarían ningún criterio editorial serio. Sin ir más lejos, en el reciente debate de primarias, mientras a la Derecha no le preguntaron por las violaciones a los DD.HH en Chile, a los candidatos de Izquierda si les preguntaron por las violaciones a los DD.HH en Venezuela.
La libertad de prensa y el acceso pluralista de la información son temas demasiado serios para ser tomado a la ligera. En Chile tenemos problemas de concentración de medios donde el 90% son de Derecha, sus dueños tienen intereses creados ya que son dueños de grandes multinacionales, en regiones todas las radios están en manos de fanáticos religiosos, y ni hablar de la precariedad en la que viven los periodistas. Daniel Jadue se equivoca en proponer algo que no soluciona nada, y Daniel Matamala está demasiado cerca del problema para realizar un análisis objetivo de fondo.