Que tras los últimos lamentables acontecimientos en La Araucanía en tuiter estén levantando los hashtag “Piñera Asesino” y “Mapuches Terroristas” son situaciones entendibles. Vivimos en tiempos donde la verdad no importa y dependiendo del sector sólo buscan validar sus propios sesgos para traer agua a su molino. Pero esto no lo pueden hacer las autoridades de un país.
Nos concentraremos en dos casos: El Ministro del Interior Rodrigo Delgado y la presidenta de la Convención Constitucional Elisa Loncón. El primero realizó un punto de prensa donde sólo habló de terrorismo y no le dedicó ni una palabra a los fallecidos. (que ahora se sabe fue uno y no dos como dijeron ayer). Por contraparte, apenas ocurrió el hecho Loncón hizo un innecesario punto de prensa condenando el “ataque racista” del Estado sin tener todos los antecedentes.
Lo complejo de lo que pasa en La Araucanía es que existen al menos tres grupos diferentes, cada uno con sus propias agendas, que efectivamente están cometiendo actos de terrorismo. La CAM que siempre ha sido transparente en decir que ellos sabotean a las empresas forestales, otro grupo de mapuche más radicalizado que ataca a todos, y al menos un grupo terrorista de ultraderecha que hace atentados para culpar a los otros dos. Todo lo anterior, sin contar con los montajes comprobados del Estado. (Operación Huracán)
De esta situación sólo vamos a salir con la verdad y sacándonos las anteojeras. La Izquierda no puede seguir negando que existe terrorismo en la zona, y la Derecha no puede seguir negando que también existen grupos paramiltares de ultraderecha. Por esto es que las autoridades tienen que ser más responsables al emtir sus opiniones, que a las redes sociales no le importe la evidencia se entiende, pero las autoridades de un país deben estar por sobre eso. No pueden salir a incendiar la pradera de manera tan irresponsable ante cada cosa que ocurre, no pueden ser cómplices de una radicalización que no beneficia a nadie.