A estas alturas, es bastante evidente que al delincuente que se pegaba cateters en el cuerpo para fingir cáncer JAMÁS le interesó volver a la Convención, después de todo ganaba un sueldo millonario sin hacer nada. La verdadera jugada fue de los constituyentes octubristas que buscaban reemplazarlo para sumar un voto a sus imbéciles propuestas .
El tema de fondo, es darnos cuenta que al octubrismo/extrema izquierda no le interesa el país, ya que hicieron esta maniobra sabiendo que iban a hundir la credibilidad de la Convención. En ese sentido no se diferencian EN NADA de la extrema derecha, lo único que les interesa es defender sus intereses e intentar hacer realidad sus irracionales consignas.