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En su trauma por no poder superar el fracaso del Apruebo, un sector de la izquierda se encuentra criticando el acuerdo al que llegaron los partidos para tener un nuevo proceso constituyente, diciendo que “está tutelado y tiene demasiados límites”, asegurando que “la gente exige más participación”… Una premisa que es completamente imbécil.
Lo que nunca entendió este sector de la izquierda, es que ellos están lejos representar al pueblo. Se llenaron la boca hablando de “soberanía popular” y escribieron/defendieron un texto que sólo lo representaba a ellos y sus pajas mentales, por lo que están completamente incapacitados para sentirse interpretes de lo que quiere el pueblo. La misma soberanía popular que siempre citan los mandó a la cresta el 4 de septiembre.
Todas las encuestas muestran que la gente quiere una Nueva Constitución y que quieren que la escriban expertos, ya que bastan dos neuronas funcionales para entender que el nuevo proceso constituyente tiene que ser diferente al anterior. A le gente le da lo mismo el diseño, sólo quiere sacarse el cacho de encima ya que tiene 100 mil otras prioridades. Al final, los únicos preocupados por la “falta de validación” que supuestamente tiene el nuevo proceso constituyente, son los mismos que sepultaron el proceso anterior.
La única Constitución que sirve es la que se aprueba. De nada sirve que sea la más democrática de la historia, que sea paritaria, que estén adentro los pueblos originarios, y que tenga miles de derechos. Las Constituciones no son un reality de participación popular ni menos un programa de gobierno, la pasada Convención jamás lo entendió y se comieron el fracaso político más grande de la historia.
El ÚNICO trabajo que tiene una la nueva Convención es presentar una Constitución que se apruebe, por lo que debe ser simple, funcional, mínima y moderada para que todos se sientan identificados. Los “bordes” y la fórmula que tenga el nuevo proceso dan exactamente lo mismo, si el texto que presentan se aprueba habrán tenido éxito. ¿Los reclamos por tener demasiados límites y estar demasiado tutelada? A LA FIFA.