En el momento en que el Partido Republicano comenzó a darse innecesarios gustitos identitarios, Chile Vamos debió bajarse del proceso y comenzar a criticarlos para marcar diferencias. Pero de manera increíble, lejos de hacer eso se sumaron hasta mimetizarse con ellos, y terminaron defendiendo un texto malo, extremista y partisano.
El gran problema de Chile Vamos es la ausencia total de líderes.
Pablo Longueira, antes de volverse loco, era un tipo que siempre estaba dos pasos adelante que el resto y miraba el escenario completo a largo plazo, en cambio ahora, Chile Vamos está llena de inútiles sin personalidad a los que sólo les interesa la pelea chica del día.
La única forma en que sacaremos al país adelante será mediante las fuerzas del centro, tanto de centro derecha como de centro izquierda, que aún con sus diferencias se pongan de acuerdo en sacar adelante al país. Lamentablemente, en Chile Vamos tienen una vergonzosa sumisión ante el Partido Republicano tan sorprendente como humillante.
¿Habrá algún líder de Chile Vamos que de un paso al frente y comience a marcar el camino? Por el bien de nuestro país ojalá aparezca pronto, porque hasta ahora ese líder NO EXISTE.