Mientras en Chile las cárceles están colapsadas y los reos venezolanos destruyen celdas y atacan a los gendarmes, Ecuador inició la construcción de una cárcel de alta seguridad “estilo Bukele”, que tendrá capacidad para unos 800 reos de alta peligrosidad y será levantada en apenas 300 días.
Esto es simple: Si a la Izquierda le gustó promover la migración ilegal por su fetiche latinoamericanista y a la derecha le gustó promover la migración ilegal para tener mano de obra barata, van a tener que lidiar con las consecuencias de esto, y eso incluye decirle al país que van a tener que gastar miles de millones de pesos en construir cárceles especiales sólo para criminales caribeños. Una nota de La Nación señala:
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, dio inicio este viernes a la construcción de la cárcel de máxima seguridad de Santa Elena, la cual tendrá un modelo inspirado en la prisión de dichas características de El Salvador, impulsada por Nayib Bukele.
Este centro penitenciario es una de las dos cárceles de máxima seguridad que Noboa prometió construir para líderes criminales, con un modelo similar a las implementadas en México o El Salvador.
Cabe destacar que entre 2021 y 2023, más de 500 presos murieron asesinados en las cárceles de Ecuador, y muchos de ellos perdieron la vida producto de disputas entre bandas rivales que tenían el control de las prisiones.
En este sentido, el mandatario comentó que “hace tan sólo siete meses, el sistema penitenciario estaba secuestrado y humillado por las organizaciones criminales que habían convertido a las cárceles en sus centros de operaciones”, algo que afirma haber cambiado gracias a la orden que dio a principios de año, en torno a militarizar las prisiones.
Por su parte, las obras tienen una inversión de 52 millones de dólares, y la cárcel se extenderá sobre 16,2 hectáreas. A la vez, el director del Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI), Luis Zaldumbide, mencionó que el recinto se construirá en un tiempo récord de 300 días.
Zaldumbide destacó el proyecto, diseñado con una capacidad para unos 800 reos, subrayando que los pabellones de máxima seguridad permitirán “garantizar que las medidas judiciales se cumplan rigurosamente”.
“Este centro será fundamental en nuestra lucha contra el crimen organizado”, indicó, añadiendo que gracias al “despliegue tecnológico de vanguardia, que incluye sistemas de videovigilancia enlazados a software de inteligencia artificial, este centro no sólo será el primero en su tipo en el país, sino que también establecerá nuevos estándares en la categorización de las personas privadas de libertad según su nivel de peligrosidad”.