FOTO VÍA EL MOSTRADOR / AGENCIA ATON
Entonces para resumir: El Caso Hermosilla explotó en la Derecha, en La Izquierda y ahora en el Poder Judicial… Al final, Luis Hermosilla demuestra que la meritocracia en Chile no existe, y que todas las instituciones del país funcionan bajo el amiguismo y el intercambio de favores.
Esto no sería necesariamente malo si quisieran mejorar al país, pero como podemos ver, con Vivanco pidiendo ayuda hasta para aparecer en “las 100 mujeres líderes de El Mercurio”, son una tropa de ordinarios que sólo buscan asegurarse a ellos mismos. Un artículo de Ciper detalla:
Ángela Vivanco escribió por primera vez a Luis Hermosilla en marzo de 2018. Le pedía apoyo para llegar a la Corte Suprema. En el celular del abogado quedaron las huellas de los esfuerzos de ambos, ante La Moneda, magistrados y senadores, para lograrlo.
Después de que ella asumió en la corte, los favores fluyeron en ambos sentidos. En una ocasión, el penalista le preguntó si tenía posibilidad de integrar sala en una causa que le interesaba y que involucraba a la PDI.
La ministra le compartió al abogado información que aún no era pública referida a recursos judiciales que afectaban a Carabineros y Fuerzas Armadas, cuando Hermosilla trabajaba para Interior.
Los dos coordinaron esfuerzos para bloquear la nominación de una candidata al máximo tribunal y apoyar a otros postulantes. Y cuando Vivanco debió concurrir en representación de la corte a la comisión parlamentaria que veía la acusación contra la jueza Silvana Donoso, antes de asistir le pidió a Hermosilla conversar sobre el tema, aunque él colaboraba en la defensa de la magistrada.
El 25 de agosto de ese 2022, ella le pide que la apoye para que la nominen como una de las 100 mujeres líderes de Chile, en un ranking que elabora el diario El Mercurio. Ella le manda un link: Vivanco: Amigo te pido tu apoyo y de contactos para que me nominen aquí. Hermosilla: Ok. Feliz!