Y así, amigas y amigos, como ya es costumbre, el tiempo nos vuelve a dar la razón.
Bastaba tener DOS neuronas funcionales para entender que el informe pericial filtrado está mal hecho, ya que los supuestos abonos de Irina Karamanos y varias personas personas más, en realidad eran CARGOS ya que incluso habían regalos metidos adentro.
Es evidente que en el apuro por querer dar un golpe noticioso, El Mostrador no lo vio y no lo quiso ver, ya que incluso inflaron en varios ceros los supuestos abonos, y todos los medios, excepto el más carismático de todos, y replicaron la noticia sin cuestionar nada.
Bien por Irina Karamanos que demostró su inocencia entregando las cartolas de su banco, mejor por el medio carismático de la historia que sigue agrandeciendo su leyenda, y pésimo por ProCultura que literalmente manejaba la contabilidad con la corneta. Una nota de La Tercera detalla:
Tras conocerse los antecedentes y pasada la medianoche, Karamanos publicó en sus redes sociales un comunicado donde descartaba cualquier tipo de anomalía.
“Niego categóricamente haber abonado monto alguno a la Fundación ProCultura, entidad a la que presté servicios desde mayo de 2021 a febrero de 2022 por un monto de 973.500 pesos mensuales”.
El asunto, sin embargo, se enredó durante la jornada después de que la abogada de la citada ONG, Susana Borzutzky, emitió una declaración que contradecía la versión de la otrora primera dama, afirmando que ella sí hizo abonos por concepto de “devoluciones de fondos”.
“Podemos confirmar que Irina Karamanos realizó trabajos para la fundación, en el marco del proyecto llamado “Recreo nos gusta el arte”, que era una iniciativa de mediación cultural con colegios vulnerables de la V Región. Esto se desarrolló durante el segundo mandato del Presidente Sebastián Piñera, en 2021. Todos los pagos se realizaron conforme al convenio, el cual se rindió y cerró oportunamente. Al momento en que el Presidente Boric salió electo y ella asumió como primera dama, de manera transparente realizó devoluciones de fondos para evitar cualquier tipo de cuestionamiento”.
Sin embargo, minutos más tarde, a las 14.19 horas, cambió la versión y eliminó lo referente a “devoluciones” e indicó: “Al momento en que el Presidente Boric salió electo y ella asumió como primera dama, de manera transparente ella dio un paso al costado para evitar cualquier cuestionamiento”.
“No hay tales abonos”
Consultada la Fundación respecto del cambio en la declaración, la abogada Susana Borzutzky explicó que en primera instancia se entregaron antecedentes contables que no habían sido “depurados”.
“Esta mañana nos enteramos de las menciones a Irina Karamanos y tras un primer chequeo interno, verificamos que efectivamente realizó trabajos para la fundación. Sin embargo, en este primer chequeo con la fundación se indicó de manera imprecisa que ella había realizado una devolución de un fondo, lo cual fue descartado tras depurar la información contable”.